sábado, septiembre 29, 2007

Compasión.

Mientras más compasión se da,
más felicidad se recibe.
Actos tan simples como escuchar,
compartir y recordar
pueden proporcionar
tremendo alivio a los demás

Por Daisaku Ikeda(???)
presidente de la



¿Cuál es la clave para dirigir la indomable energía de la vida hacia la creación de felicidad y valor? Creo que la acción compasiva es, precisamente, lo que puede efectuar esta transformación.

Nuestros deseos personales demandan energía del mundo que nos rodea, pero cuando extendemos la mano para tocar y enriquecer las vidas de los demás, la compasión dirige esa energía hacia el exterior. Y mientras más energía damos, por extraño que parezca, más energía podemos experimentar y disfrutar para nosotros.

La compasión puede ser algo tan simple como escuchar a alguien contarnos sus problemas. En cierta oportunidad oí hablar de una enfermera que tenía que cuidar a una señora de 87 años de edad a la que siempre se le veía como en un letargo, sentada en su silla de ruedas, mostrando una expresión aburrida, con los labios apretados herméticamente y con las cejas tejidas en un ceño fruncido permanente.

Cuando la enfermera la vio por primera vez, su deseo sincero fue hacerla sonreír y hacerle traer una expresión más cálida a su rostro. A partir de allí, siempre que se encontraban, tomaba a su paciente de la mano y le hablaba. Entonces, un día, en la cafetería del hospital, la señora comenzó a compartir con ella todo cuanto había sufrido en la vida. La enfermera, simplemente, le sostuvo la mano como siempre, la escuchó, y siguió su historia en silencio, asintiendo con la cabeza.

Cuando la paciente terminó de hablar, la enfermera la llevó a su cuarto. En el camino, la anciana le susurró a su nueva amiga. "Nunca nadie me había escuchado así". Y desde ese día en adelante, se vio brillar en su rostro una resplandeciente sonrisa.

La compasión ha de ser encontrada en actos tan simples como escuchar, compartir y recordar. Cuando nos proponemos llevar un estilo de vida compasivo, nuestros sufrimientos y nuestros fracasos asumen nuevo significado. Podemos empezar a verlos como requisitos para poder entender el dolor de los demás y para saber qué acción tomar para causar alivio. Hay tiempos en los que las personas sólo pueden encontrar consuelo en la voz de alguien que ha experimentado su mismo pesar.

Una actitud de compasión no significa mirar a alguien desde una posición de superioridad, sintiendo pena por su miseria. Es un sentimiento de empatía hacia otros seres humanos iguales a nosotros y su base es el respeto. La compasión es como un cómodo salón, bien iluminado, al que invitamos a entrar a un amigo. En él nos sentamos a dialogar sobre la vida como iguales, a aprender el uno del otro y a esforzarnos por mejorar, juntos, la vida de ambos.

Del mismo modo en que el sufrimiento no sólo nos afecta a quienes lo estamos padeciendo, pues los demás siempre se ven afectados por nuestra infelicidad, no puede haber felicidad que sólo exista sólo para a uno mismo. La felicidad no es un "pastel" de un tamaño fijo que deba cortarse cuidadosamente para que cada uno pueda tener la delgada rodaja que le corresponde. Al aumentar la felicidad de uno mismo o la de los demás, aumentamos la cantidad total de energía positiva que vibra en el mundo. Quienes de verdad se regocijan por la felicidad ajena también disfrutan una felicidad profunda y genuina dentro de sí. De hecho, cada uno de nosotros alcanza, exactamente, el mismo grado de felicidad que es capaz de ayudar a otros a alcanzar.

En contraste, un estilo de vida centrado y obsesionado en uno mismo redunda en una miseria que deja heridas profundas no sólo en nosotros, sino también en quienes nos rodean. El egoísmo es una gran fuente de sufrimiento en el mundo.

La compasión, sin embargo, va más allá de simplemente ser bueno o amable. A veces la compasión requiere que le señalemos a otro cuáles son sus debilidades o cuáles son esos puntos oscuros que esa otra persona no puede ver; después de todo, en ello yace la causa de su infelicidad, lo que lo detiene en su propio crecimiento. Ver estas faltas, estar consciente de ellas y no mencionarlas por cobardía, es falta de compasión. Es ser un falso amigo. La compasión y el coraje se encuentran profundamente ligados.

Recuerdo unas palabras de una película muy popular en mi juventud: "Usted tiene que ser duro para vivir. Pero si usted no es suave, la vida pierde sentido." Se requiere de gran fuerza para involucrarse en los sufrimientos de otras personas y trabajar con ellos hasta verlos superar sus problemas.

El cuidar de otros es también la clave para superar nuestro propio sufrimiento. Eleanor Roosevelt sigue siendo una de las mujeres más admiradas del siglo XX. Ella jugó un papel importante cuando elaboró un bosquejo de la Declaración Universal de Derechos Humanos. Su carácter era tal, que al final pudo ganarse el respeto hasta de sus más ásperos críticos. Y sin embargo, esta mujer, cuyo destino era ayudar a tantas personas, comenzó su vida siendo una joven torpe y dolorosamente tímida que distaba mucho de ser feliz.

Criada por su tía y su tío, casi carecía totalmente de amigos durante los primeros años de su vida pero, en cierto punto, comprendió que la única manera de superar su propio sufrimiento estaba en prestarle más atención a otras personas que a sí misma. Trabajó duramente para entrenarse a que, en vez de preocuparse por la impresión que los demás tuvieran de ella, se concentraría en lo que ella podía hacer por los demás. Y así, poco a poco, comenzó a florecer hasta convertirse en una mujer que, como Primera Dama de los Estados Unidos, llegó a ganarse el amor y la admiración de millones de personas, gracias a su cuidadosa y dedicada preocupación por el pueblo.

La compasión libera sabiduría. Los padres se mantienen constantemente buscando la manera de ayudar a sus hijos a vivir vidas mejores y más exitosas. Cuando aprendemos cuán íntimamente ligadas están todas las formas de vida, la compasión puede extenderse más allá de nuestros amigos y nuestros familiares hasta poder abrazar incluso a aquellos cuya compañía no nos es particularmente grata.

Me gustaría compartir una hermosa imagen de una antigua parábola india que ilustra la interconexión de todo lo que existe. Decorando el techo de un palacio mítico hay una enorme red. De cada nudo de esta red pende una joya brillante que atrapa y refleja la imagen de cada una de las otras joyas colgantes. De este modo, cada una contiene dentro de sí a todas las demás. Cada una es esencial para el brillo chispeante de la totalidad. Sin las otras, una sola joya aislada no tendría, en absoluto, el mismo fulgor.

De la misma manera, es sólo cuidando de los demás que podemos expandir nuestra propia vida y aumentar nuestro propio brillo y vitalidad.

http://www.sgi.org/spanish/presidente/ensayos/obras_ens_11.html

jueves, septiembre 27, 2007

Aquí hay gato encerrado

No siempre las cosas salen como lo planeamos.




"Lo positivo de que algunas cosas nos salgan "pal traste" es que si los planes fueran tan sencillos y salieran al pie de la letra nos quedarían cosas para descubrir.

Lo único que debemos preveer es no quedar encerrados en nuestro propósito. No vaya ser que por atrapar el pájaro, nunca descubramos quién estaba atrapado....."

viernes, septiembre 21, 2007

CULTURA DEL SLOW DOWN



Vive el presente sin pensar en el futuro. Saboréalo, disfrútalo, con calma, sin prisas. Vive para ti, no para el tiempo que ha de venir, para las horas, los minutos, los segundos, que se desgranan inexorablemente uno tras otro. Que importa.... Sólo importas tú.!!! No te apresures, no pienses en lo que has de conseguir, consíguelo poco a poco, paso a paso, sin atosigarte, sin dejar de respirar. Piensa que lo único que importa es lo que estás viviendo, no lo que has de vivir. ¿El futuro? ¡Ya vendrá! Que espere!!!!!.



Ya voy para 18 años desde que ingresé en la Volvo, una empresa sueca. Trabajar con ellos es una convivencia muy interesante. Cualquier proyecto aquí demora dos años para concretarse, aunque la idea sea brillante y simple. Es una regla. Los procesos globalizados causan en nosotros (brasileños, argentinos, peruanos, venezolanos, mexicanos, australianos, asiáticos, etc.) una ansiedad generalizada en la búsqueda de resultados inmediatos.

En consecuencia, nuestro sentido de la urgencia no surte efecto dentro de los plazos lentos de los suecos. Los suecos debaten, debaten, realizan "n" reuniones, ponderaciones, etc. y trabajan con un esquema más bien "slowdown" . Lo mejor es constatar que, al final, esto acaba siempre dando resultados en el tiempo de ellos, los suecos, ya que conjugando la madurez de la necesidad con la tecnología apropiada, es muy poco lo que se pierde por aquí en Suecia, lo resumo así:

* Suecia es del tamaño del estado de San Pablo (Brasil).
* Suecia tiene tan sólo dos millones de habitantes.
* La ciudad más grande, Estocolmo, tiene apenas 500.000 habitantes, compare con Curitiba, Brasil, donde existen dos millones de habitantes; o tan sólo Mar del Plata, Argentina, ciudad balnearia, donde casi un millón de personas viven permanentemente, o Rosario, Argentina, con tres millones.
* Empresas de capital sueco: Volvo , Scania, Ericsson, Electrolux, ABB, Nokia, Nobel Biocare, etc. Nada mal, ¿no?, para tener una idea de la importancia de ellas basta mencionar que Volvo es la que fabrica los Motores propulsores para los cohetes de la NASA.

Los suecos pueden estar equivocados, pero son ellos quienes pagan mi salario. Por ahora, menciono especialmente que no conozco un pueblo, como pueblo mismo, que posea más cultura colectiva que los suecos. Voy a contarles una historia corta, sólo para darles una idea: La primera vez que fui para Suecia, en 1990, uno de mis colegas suecos me recogía del hotel todas las mañanas. Estábamos en el mes de septiembre, algo de frío y nevisca. Llegábamos temprano a la Volvo y él estacionaba el auto muy lejos de la puerta de entrada (son 2,000 empleados que van en coche a la empresa).

El primer día no hice comentario alguno, tampoco el segundo ni el tercero. En los días siguientes, ya con un poco más de confianza, una mañana le pregunté a mi colega:" Tienen ustedes lugar fijo para estacionar aquí?, pues noté que llegamos temprano, con el estacionamiento vacío y dejaste el coche al final de todo...". Y él me respondió simplemente: "Es que como llegamos temprano tenemos tiempo para caminar, y quien llega más tarde, ya va a llegar retrasado y es mejor que encuentre lugar más cerca de la puerta. ¿No te parece?" Imaginen la cara que puse. Y con ella fue suficiente para que yo revisara en profundidad todos mis conceptos anteriores.

En la actualidad, hay un gran movimiento en Europa llamado "Slow Food" . La Slow Food International Association, cuyo símbolo es un caracol, tiene su central en Italia (el site en la internet es muy interesante). Lo que el movimiento Slow Food predica es que las personas deben comer y beber lentamente, dándose tiempo para saborear los alimentos, disfrutando de la preparación, en convivencia con la familia, con los amigos, sin prisa y con calidad. La idea es contraponerse al espíritu del Fast Food y lo que éste presenta como estilo de vida. La sorpresa, por tanto, es que ese movimiento de Slow Food está sirviendo de base para un movimiento más amplio llamado Slow Europe como resaltó la revista Business Week en una de sus últimas ediciones europeas.

La base de todo está en el cuestionamiento de la "prisa" y de la locura" generada por la globalización, por el deseo de "tener en cantidad" (nivel de vida) en contraposición al de "tener en calidad" , "calidad de vida" o "calidad del ser". Según la Business Week, los operarios franceses, aunque trabajen menos horas (35 horas por semana) son más productivos que sus colegas estadounidenses o británicos. Y los alemanes, que en muchas empresas ya implantaron la semana de 28,8 horas de trabajo, vieron su productividad aumentar en un elogiable 20%. Esa llamada "slow attitude" está llamando la atención hasta de los estadounidenses, discípulos del "fast" (rápido) y del "do it now!!!!" (Hágalo ya!). Por tanto, esa "actitud sin prisa" no significa hacer menos ni tener menor productividad. Significa sí, trabajar y hacer las cosas con "más calidad" y "más productividad" , con mayor perfección, con atención a los detalles y con menos estrés.

Significa retomar los valores de la familia, de los amigos, del tiempo libre, del placer del buen ocio, y de la vida, en las pequeñas comunidades. Del "aquí" presente y concreto, en contraposición contra lo "mundial" indefinido y anónimo. Significa retomar los valores esenciales del ser humano, de los pequeños placeres de lo cotidiano, de la simplicidad de vivir y convivir, y hasta de la religión y de la fe.

Significa un ambiente de trabajo menos coercitivo, más alegre, más leve y por lo tanto, más productivo, donde los seres humanos realizan, con placer, lo que mejor saben hacer.

Es saludable pensar detenidamente en todo esto. ¿Será posible que los antiguos refranes: "Paso a paso se va lejos" y "La prisa es enemiga de la perfección" merezcan nuevamente nuestra atención en estos tiempos de locura desenfrenada? ¿Acaso no sería útil que las empresas de nuestra comunidad, ciudad, estado o país, empiecen ya a pensar en desarrollar programas serios de "calidad sin prisa" hasta para aumentar la productividad y calidad de los productos y servicios sin necesariamente perder calidad del ser"? En la película "Perfume de Mujer" (Podeis ver el pps. El último tango ) hay una escena inolvidable en la que el ciego (interpretado por Al Pacino) invita a una muchacha a bailar y ella responde: "No puedo, pues mi novio va a llegar en pocos minutos" . A lo que el ciego responde: "Pero es que en un momento, se vive una vida" , y la saca a bailar un tango. El mejor momento de la película es esta escena de sólo dos o tres minutos.

Muchos viven corriendo detrás del tiempo, pero sólo lo alcanzan cuando mueren, ya sea de un infarto o un accidente en la autopista por correr para llegar a tiempo, o para otros que están tan ansiosos por vivir el futuro que se olvidan de vivir el presente, que es el único tiempo que realmente existe. Todos en el mundo tenemos tiempo por igual, pues nadie tiene ni más ni menos de 24 horas por día. La diferencia está en el empleo que cada uno hace de su tiempo. Necesitamos saber aprovechar cada momento, porque, como dijo John Lennon, "La vida es aquello que sucede mientras planeamos el futuro".


Felicitaciones por haber conseguido leer este mensaje hasta el final. Hay muchos que lo habrán dejado por la mitad para "no perder tiempo" tan valioso en este mundo globalizado.

jueves, septiembre 20, 2007

El poder de un BESO


No me ha entrado un ataque de romanticismo empedernido. Lo dicen los expertos: Besar puede alargar la vida, reducir el estrés y hacerte más feliz. Un reciente estudio realizado por una universidad de Boston entre 3.300 parejas ha puesto de manifiesto que los que besan a menudo (al menos ocho veces al día) reducen significativamente el riesgo de sufrir estrés (uno de los factores de riesgo de las enfermedades cardiovasculares) y depresión.

El experimento ha ido más lejos y ha estudiado qué clase de besos ofrecen más beneficios para la salud. ¿¿¿El resultado??? .El beso más terapéutico es aquel que se da en señal de agradecimiento, de saludo o por el puro placer de besar, sin necesidad de que sea el preludio de nada más….. Y ¿¿¿Cuál es el beso más saludable??? Sin duda el de los niños. Así que ya sabéis, si tenéis hijos, aprovechaos de de ellos y dadles muchos achuchones!!!!!!!!!!!!!!!

Y para terminar ¿¿¿Cuánto debería durar el beso perfecto??? No mucho. Según los expertos, 10 segundos es más que suficiente para sacarle todo su potencial sanador. Y, sin embargo, curiosamente, la mayoría de los besos que damos a lo largo del día duran bastante menos, apenas unos 5 segundos, como se manifestó en el estudio.

Así que
“a partir de ahora, nada de besos apresurados, tomémonos nuestro tiempo para besar”

jueves, septiembre 13, 2007

El lazo y el abrazo.



Nunca había reparado en como está hecho un lazo..
es curioso un lazo es una cinta dando vueltas,
que se enrosca, gira....
pero circula, no enreda....
un lazo es como un abrazo,

corazón con corazón
apretados entre los brazos así es el lazo:
un abrazo en un regalo
en el cabello
en el vestido
en cualquier cosa donde lo ponga
y cuando tiro de una punta
¿Que es lo que sucede?
Se va escurriendo, menguando,

desapareciendo ...se deshace el lazo
suelta el obsequio,

el cabello y a la cinta ¡Que curioso!
No le falta ni un pedazo.
¡Ah entonces así es el amor la amistad!
Todo lo que es sentimiento,

como un pedazo de cinta...
enrosca, asegura un poquito,

más puede deshacerse
en cualquier momento
dejando libres las dos puntas del lazo
por eso es que se dice
lazo afectivo, lazos de amistad
y cuando dos se separan
entonces se dice..se rompieron los lazos
pero salen dos partes y también sale la cinta
sin perder ningún pedazo
Así es el amor, no captura, no exclaviza,

no aprieta no sofoca.....
porque si eso ocurre yá dejó de ser lazo.
Te deseo un lazo bien hecho

y un abrazo apretado!!!!!

El lazo y el abrazo
(Ver presentacion en PPS)

martes, septiembre 11, 2007

Magia.

Entre todos creamos esta magia, cada uno de nosotros pone su cuota de ternura, sonrisa, amor…. y vamos formando hermosos lazos de amistad, todos los días.

Son los sentimientos los que crean la magia y hablan por nosotros.

Un millón de abrazos mágicos para todos!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!

Hoy......


Hoy estaría bien hacer algo fuera de lo común. Podemos, por ejemplo, bailar por la calle mientras nos dirigimos al trabajo. Mirar a los ojos a un desconocido y hablar de amor a primera vista. Sugerirle al jefe una idea que puede parecer ridícula, pero en la que creemos.
Comprar el instrumento que siempre quisimos tocar, pero nunca nos atrevimos.
Hoy podemos llorar por algunas viejas penas que aun están presas en la garganta.
Llamaremos a alguien que juramos que no volveríamos a hablar, pero de quien desearíamos escuchar un mensaje en nuestro contestador automático. Hoy puede considerarse como un día fuera de la agenda en la que escribimos todas las mañanas.
Hoy cualquier falta será admitida y perdonada.

Hoy es día de sentir alegría por la vida.



(Extraído del libro Maktub de Coelho.)