martes, diciembre 05, 2006

Si me voy.




Si me voy antes que tu

no quiero que llores

porque tu llanto será

en mi alma una presión.

Si me voy antes que tu

quiero que atesores

cada recuerdo que está

guardado en tu corazón.

Si me voy antes que tu

no quiero que lamentes

porque tu lamento hará

que se marchite el amor.

Si me voy antes que tu

quiero que continúes

sonriendo y viviendo más

para tener de la vida razón.

Si me voy antes que tu

no quiero que olvides

que estaré esperando allá

por ti en aquel rincón.

El rincón donde ya

nada nos separará;

donde sólo existen

la luz y el amor.

Maureen Andrea Addison-Smith Salvo

Veremos.....













Había una vez un campesino chino, pobre pero sabio,
que trabajaba la tierra duramente con su hijo.

Un día el hijo le dijo:
- ¡Padre, qué desgracia! ¡Se nos ha ido el caballo!
- ¿Porqué le llamas desgracia? - respondió el padre
-Veremos lo que trae el tiempo...

A los pocos días el caballo regresó, acompañado de otro caballo.
- ¡Padre, qué suerte! - exclamó esta vez el muchacho
-Nuestro caballo ha traído otro caballo.
- ¿Porqué le llamas suerte? - repuso el padre
-Veamos qué nos trae el tiempo...
En unos cuantos días más, el muchacho quiso montar
el caballo nuevo, y éste, no acostumbrado al jinete,
se encabritó y lo arrojó al suelo.
El muchacho se quebró una pierna...

- ¡Padre, qué desgracia! - exclamó ahora el muchacho
-¡Me he quebrado la pierna!
Y el padre, retomando su experiencia y sabiduría, sentenció:
-¿Porqué le llamas desgracia?
-Veamos lo que trae el tiempo...

El muchacho no se convencía de la filosofía del padre,
sino que gimoteaba en su cama.

Pocos días después pasaron por la aldea los enviados del rey,
buscando jóvenes para llevárselos a la guerra.
Vinieron a la casa del anciano, pero como vieron al joven
con su pierna entablillada, lo dejaron y siguieron de largo.

El joven comprendió entonces que nunca hay que dar
ni la desgracia ni la fortuna como absolutas,
sino que siempre hay que darle tiempo al tiempo,
para ver si algo es malo o bueno.


La moraleja de este antiguo consejo chino es que la vida
da tantas vueltas, y es tan paradójico su desarrollo,
que lo malo se hace bueno, y lo bueno, malo.

Lo mejor es esperar siempre el día de mañana,
pero sobre todo confiar en DIOS,
porque todo sucede con un propósito positivo
para nuestras vidas.....


http://www.holistica2000.com.ar/Pensant/Pensant47.htm

http://www.coachingparati.com/recursos/metaforas/antiguo_consejo_chino.htm