Un buen día, el solitario conoció a una hermosa joven y vivieron juntos, primero un año y después durante cinco años llenos de alegría y felicidad. Pero una noche, la hermosa joven le dijo: «Amor mío, quiero irme, pues he conocido a otro».
Y él le contestó:«Me has dado tantas y tantas alegrías durante estos cinco años llenos de amor que si te marcharas te recordaría todo el tiempo. He vivido unos momentos tan intensos que por el solo hecho de recordarlos podría ser feliz durante tres siglos».
Julos Beaucarne
1 comentario:
Pero esta persona debe ser o bien un cura moderno, o masoquista.
Porque en esos momentos, a mi se me ocurriria tirarla por la ventana, eso si, que le cayese encima a ser posible al "otro"......
Para una persona "civilizada", me parece una reaccion extraordinaria (de cura), pero coño, si me suelta a mi eso, asi de golpe, no te quepa duda...por la ventana.
Y por el bien de ella, si cada cinco años cambia...., ojala se transforme en gata, por eso que dicen que caen siempre de pié, y que viva a ser posible en una planta baja o maximo un primer piso.
Me cago en la mar, si una mujer me dice sin sospechar nada, asi, como quien le dice "cariño, pedimos para cenar una pizza, que se va con otro, normalmente, con mi caracter, me cogeria un esparaban y entonces nada, pero si no me coje, la ventana que tenga mas cerca, pero antes, le pondria el bolso "en bandolera", con una bombita dentro.....
Dulce, que tambien hay quien tiene "alma de cabrón"......
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